Está libre de contaminación. La higiene es uno de los puntos más importantes cuando se habla de la industria de los alimentos. Federaciones internacionales establecieron una serie de condiciones sobre qué materiales pueden entrar en contacto con los alimentos y la comida y el acero inoxidable es uno de ellos. Cumple con estas reglas, ya que es sumamente higiénico al no corroerse y aunque pase largos periodos de tiempo en contacto con diferentes sustancias, no se alterará su composición. Esta condición garantiza que los alimentos no se contaminen, y así no se volverán tóxicos para la salud de las personas que los consuman
Es de alta resistencia. Los altos niveles de níquel y cromo que lo confluyen hacen que sea sumamente resistente al calor y al frío. Aunque sea en capas delgadas ya cumple esta función, por eso podemos encontrarlo alrededor de máquinas como heladeras, lavarropas, termos, etc. Así los electrodomésticos o utensilios pueden soportar el uso diario sin importar la temperatura, ni perder la forma. Al mismo tiempo, también soporta la humedad y la corrosión sin deteriorarse. Sin embargo, para que esto así suceda se debe limpiar de la forma adecuada. En ese sentido, una de sus mejores cualidades es que soporta la exposición a químicos, lo cual sería contraproducente y abrasivo para otra clase de materiales.
Tiene flexibilidad en uso y fabricación. Su versatilidad para adaptarse a todo tipo de formas y grosores permite que los fabricantes puedan hacer desde cubiertos hasta planchas industriales para restaurantes. Se pueden conseguir implementos con espesores de 0,05 milímetros y hasta de varios centímetros y en todos los casos, estos resisten las presiones, los golpes y los cambios de temperatura, por lo que son flexibles en sus posibilidades de uso y fabricación.
Su limpieza e higienización es sumamente sencilla. Una cualidad que hace al acero inoxidable perfecto para industrias de alimentos y locales de comida, es su fácil limpieza. Gracias a su reluciente superficie siempre parece nuevo, y debido a que es lisa, se puede limpiar en el ámbito industrial y casero de forma rápida, sencilla y eficaz. Con unos ciertos cuidados mínimos y algunos trucos de higiene, los artículos pueden quedar como nuevos aunque tengan años de uso. Las cocinas, bandejas y carritos de servicio se ven elegantes y el material puede perdurar por años.
Adquirir productos o recursos de cocina industrial de acero inoxidable es una buena inversión en todos los sentidos, porque es un material que a pesar de tener un cierto costo de adquisición, es muy duradero, estético y además tiene varias ventajas frente a otros materiales. Además, el uso del acero inoxidable en determinados ámbitos comerciales es sinónimo de elegancia y modernidad.
